¿Qué diferencia hay entre una casa prefabricada y una casa modular?
Las casas que no utilizan ladrillos están ganando popularidad en Argentina, y muchos se preguntan en qué se diferencian las casas modulares de las clásicas “casas prefabricadas”.
En un contexto en que la posibilidad de tener una casa propia vuelve a aparecer entre las conversaciones de los argentinos, principalmente por el resurgimiento del crédito hipotecario, surge la inquietud sobre qué tipo de vivienda conviene adquirir. Con el costo de construcción prácticamente duplicado en dólares en el último año, es crucial evaluar qué se puede adquirir o construir por precios accesibles, manteniendo la calidad.
Una de las opciones que se puede considerar son las propiedades construidas en fábricas. Pero, ¿cuál es la diferencia entre casas prefabricadas y modulares, que cada vez son más conocidas?
Las casas modulares: la evolución de las prefabricadas
Las casas modulares pueden transportarse a cualquier lugar del país. Una casa modular es, de hecho, una casa prefabricada. En otras palabras, es un inmueble construído, en su mayoría, dentro de una fábrica. La principal diferencia en Argentina es que el término “casa prefabricada” a menudo se asocia con mala calidad. Por ello, se busca promover el concepto de “modular”, resaltando que las viviendas fabricadas hoy en día con esta tecnología son de calidad superior.
Federico Azzollini, socio gerente de Icon+, explica que el término “prefabricada” tiene un preconcepto más arraigado en Buenos Aires que en otras regiones del país. Por eso se busca adoptar la palabra “modular”. Actualmente, incluso se están desarrollando casas modulares con diseño de autor por arquitectos renombrados, lo que democratiza el acceso a un buen diseño arquitectónico que, de otra forma, podría resultar inalcanzable.
Ventajas de las casas modulares
Las casas modulares se construyen a través de un proceso de fabricación en serie, similar al de la industria automotriz. En lugar de levantar la casa en el terreno, se construye casi completamente en una fábrica. Este método proporciona múltiples beneficios:
– Calidad controlada: Al fabricarse en planta, se logra una precisión de hasta 2 mm.
– Velocidad de ejecución: Algunas casas modulares pueden levantarse en apenas dos meses.
– Proceso sustentable: Utilizan materiales reciclables y generan un menor impacto ambiental.
Además de reducir los plazos de obra, las casas modulares ofrecen mayor precisión en costos y medidas. Se transportan al terreno en partes una vez finalizadas, evitando las inclemencias climáticas que pueden alterar el proceso de construcción.
Lucas Salvatore, presidente de Idero, señala que la diferencia en tiempo de entrega puede impactar significativamente en el valor debido a la inflación. Por ejemplo, si una casa se entrega en cuatro meses en lugar de 24, el ahorro se vuelve considerable.
En cuanto a los costos de construcción, especialistas afirman que levantar una casa con tecnología modular se encuentra en un rango similar al de la construcción tradicional. Sin embargo, debido a la producción en serie, algunas casas modulares pueden ser entre un 20% y un 25% más económicas que las tradicionales, pero con todas las ventajas que ofrece esta tecnología.
Las casas modulares también pueden diseñarse según la zona bioclimática en la que se ubicarán, lo que mejora la eficiencia energética y se traduce en ahorros en suministros como electricidad y gas.
Conclusión
Las casas modulares representan una alternativa innovadora y accesible en el panorama de la construcción. No solo ofrecen calidad y diseño, sino que también se adaptan a las necesidades del entorno y son más sostenibles. A medida que más argentinos buscan opciones de vivienda, entender las diferencias entre casas prefabricadas y modulares se vuelve esencial para tomar decisiones informadas.
Fuente: María Josefina Lanzi